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Articulo

La lactancia materna y el control del niño sano en nuestros hijos “Proteger la Lactancia Materna: Una Responsabilidad Compartida"

  • 27/07/2022

La lactancia materna es un importante alimento para los niños que garantizar su salud y los ayuda a proteger de muchas enfermedades propias de la infancia al suministrarle energía y nutrientes durante los primeros meses de vida. Los niños amamantados muestran un mejor desempeño en las pruebas de inteligencia, son menos propenso al sobrepeso, obesidad o padecer diabetes. Las mujeres que amamantan presentan un menor riesgo de padecer cáncer de mama y de ovario.

De acuerdo con la OMS y UNICEF se recomienda que los niños inicien con la lactancia materna la primera hora de nacimiento y sean amamantado durante los primeros 6 meses de vida. A partir de los 6 meses de edad, los niños puedan comenzar a ingerir alimentos complementarios seguros hasta por los 2 años.

De acuerdo con la UNICEF, la lactancia materna además de proporcionar a niñas y niños todos los nutrientes y la hidratación necesaria, proporciona beneficios emocionales y psicológicos al bebé como a la madre al propiciar la mejor salud del bebe. Por otro lado, se ha verificado que la lactancia ayuda a prevenir infecciones gastrointestinales y respiratorias, obesidad, leucemia, alergias, cáncer infantil, hipertensión y colesterol alto.

La lactancia materna ayuda también a la madre a su recuperación física disminuyendo el riesgo de hemorragia después del del nacimiento y reduce el riesgo de depresión post-parto. A largo plazo contribuye a disminuir las probabilidades de desarrollar cáncer de ovarios, cáncer de mama, diabetes mellitus tipo II, hipertensión, ataques cardiacos, anemia y osteoporosis.

Asimismo, durante la niñez es importante tener controles pediátricos de niños sanos con frecuencia porque el desarrollo del niño es rápido. Cada control pediátrico incluye un examen físico completo donde se registra el peso, estatura e información importante, como la audición, visión y otros exámenes. Se recomienda visitar al pediatra al décimo día haber nacido, una vez al mes al hasta cumplir los seis meses. En el segundo mes se comienza con la indicación de las vacunas obligatorias de acuerdo con el cronograma de vacunación del MINSA. Cada consulta que realiza con la pediatría es una oportunidad para preguntar sobre el desarrollo de su hijo y alertar ante posibles complicaciones.


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