Los cambios en el estilo de vida pueden disminuir los casos de cáncer

Ya antes se ha hablado de la importancia de llevar un estilo de vida saludable, pero si esta recomendación viene respaldada por cifras, se hace mucho más evidente su relevancia.

Según recientes estudios, de 20 % a 40 % de casos de cáncer se podrían prevenir llevando un estilo de vida saludable. Es decir, si fumas, bebes más de una copa al día, no acostumbras tener actividad física (o lo haces por escasos minutos diarios), tienes sobrepeso u obesidad, y/o consumes abundantes alimentos ricos en grasas y carbohidratos; sería mejor que consideraras dar un giro de 180° a tu estilo de vida, pues tienes entre 20 % y 40 % más riesgo de padecer cáncer, que una persona con hábitos saludables. Y eso no es todo, pues mientras menos saludable sea tu estilo de vida, tu riesgo se incrementará.

Otro dato interesante es que entre el 80 % y 90 % de tumores malignos relacionados con el tabaquismo, son prevenibles. Así que, ¿te animas a dejar de fumar?

Algunas recomendaciones para mejorar tu estilo de vida:

Dieta equilibrada:

Consume una dieta variada, incluye todos los alimentos de la pirámide nutricional en cantidades suficientes (ni más, ni menos), no olvides consumir frutas y verduras, de preferencia crudas. Calcula la cantidad de calorías que necesitas, multiplicando 30 o 40 por tu peso en kilogramos, dependerá de la actividad física que realices o si deseas consulta en la página web de prevención de salud en RIMAC http://prevencionrimac.com/salud/Biblioteca-virtual/Calculadoras/Calculadora-CaloriasDiarias. Si no sabes qué alimentos incluir en tu alimentación, pide ayuda a un profesional en nutrición.

Hábitos tóxicos:

Deja el tabaco y el consumo excesivo de alcohol. En este último caso, no más de una copa de vino o un vaso de cerveza al día.

Actividad física:

Lleva una vida activa, realizar al menos 30 minutos diarios de actividad física te ayudarán a quemar calorías sobrantes, fortalecer huesos y músculos, y a mediano plazo, controlar tu presión arterial, colesterol y glucosa en sangre. Otro beneficio de la actividad física es la eliminación del estrés, la facilidad para conciliar el sueño, mejora de la autoestima; además puede ser un buen medio para mejorar tu vida social si participas de alguna clase de deporte.

Higiene:

Tener una adecuada higiene puede reducir nuestro riesgo de padecer muchos problemas de salud, como infecciones, problemas dentales o de piel.

Vida social:

Tener actividad social es un aspecto básico para la salud de las personas. El aislamiento social puede llevarnos a un deterioro gradual e irreversible de las capacidades físicas y mentales, incluso la incapacidad física y la demencia.

Equilibrio mental:

En el sentido de tener bienestar emocional y psicológico. El estrés, cansancio, irascibilidad, ansiedad, son algunos signos de un estado mental poco saludable. Si te sientes así, busca ayuda profesional.