El modelo de pronóstico climático CFSv2 de la NOAA muestra que las precipitaciones estacionales para el periodo ENE-MAR 2019 son consistentes con la presencia de un evento oceánico de El Niño. En virtud de ello las lluvias en la sierra sur y central tenderían a ser menores que lo habitual en un año cualquiera.
En la imagen 1, se muestra el escenario de precipitaciones consolidado para los meses de Enero-Marzo del año 2019.
En la actualidad las temperaturas en la línea ecuatorial son mayores que lo que corresponde a lo normal y alcanzan ya niveles de un evento moderado de El Niño. No obstante; este aún no ha sido declarado por falta de una más consistente respuesta atmosférica. Deben darse aun cambios en la circulación que garanticen la sostenibilidad de El Niño en los siguientes meses. La imagen 2, también de NOAA, es concluyente respecto del estado de las temperaturas del Pacífico al 2 de diciembre último.
La incertidumbre en este caso está en la falta de una respuesta atmosférica al calentamiento del mar. Ello; en tanto esa respuesta suele ser supresora de las lluvias en la sierra.
De otro lado el calentamiento litoral que según ENFEN tiene 67% de probabilidades de convertirse en un evento débil de El Niño Costero, abre las puertas a la posible ocurrencia de huaicos en las zonas bajas de las cuencas de Lima. Ese es el mayor riesgo que encaramos en la próxima estación de lluvias.